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INT / TARDE / METRO de SANTIAGO
LEE espera en el andén atiborrado, mira hacia los dos extremos y camina a paso acelerado.
INT / TARDE / METRO de SANTIAGO
Un claro se forma alrededor de LEE en el carro hacinado. En tres estaciones se baja la mayoría de los pasajeros del vagón. Nadie sube.
EXT / TARDE / CALLE del CENTRO
LEE camina como en un deep blues. El sol se pone dejando los restos de cielo- cubiertos de edificios- violáceos celestes y anaranjados. Unas lolis vestidas de aberraciones eróticas medievales lo siguen de lejos. Y murmullan entre ellas.
EXT / TARDE / BAJO NIVEL
Una corriente de aire en un paso-bajo-nivel hace que LEE se detenga y estire sus brazos mientras los buses agitan su campo de fuerza empujándolo en reversa. Su sustancia se eleva y fuga por los respiraderos y los dos finales del túnel.
La gente se junta como peces atraídos por migas de pan en la superficie.
Un auto choca contra un grifo.
Agua sale disparada con furia hacia arriba.
Un carro frutero se detiene.
A lo lejos desenrollan una gigantografía publicitaria; tres tipos de queso y un campo sureño.
Las sirenas de alerta suenan desde las esquinas
Espontáneamente surge un cuadro renacentista.
INT / TARDE NOCHE / CASA X
LEE entra al living de una casa escasamente iluminada con ampolletitas rojas y verdes del equipo de sonido. 6 siluetas de personas, apenas distinguibles de la penumbra se convulsionan envueltos en voodoo y África. Observados por sus ídolos anoréxicos desde las paredes blancas. Adornados con miembros flagelados y siameses. Gimiendo como gatos tristes acercan sus bocas y respiran el alma ardiente del otro. Desaparecen completamente.
Im alive! Im alive! I see fire in the dead man’s eye.
LEE incorporado intenta retener a una muchacha morena que danza en ochos y encuentra su boca en un lapso caníbal. Algo la ilumina desde el suelo, la tierra se abre en el roce.
La silueta de un tipo golpea las cuerdas de su violín detrás de una cortina blanca. Y otro calato sentado en un sofá con grandes ojos blancos encendidos estrella monedas en el piso. Cuando alguien accidentalmente se apoye en el interruptor, más adelante, la sombra vulnerada estrellará el arco y se lo entregará trizado como una ofrenda a la muerte para que acelere su cosecha. Se podía olfatear por ahí, quién sabe. Ya estaban tiritando.
La voluntad violenta de la muchacha escurridiza se intromete en medio de las parejas erotizadas y les tuerce el deseo.
Algo tiene que ver Satán en todo esto.
Hay algo de extraño en esta escena. Sólo puedo transcribir algunos pasajes y de forma borrosa. Una batalla campal en traje de baño y el archienemigo de LEE sumergido hasta el labio inferior como una sierpe de pantano en la piscina inmaculada, solo, rodeado por criaturas bronceadas jugando freesbee y ula ula. El ejercito superegoistico noble y de belleza uniforme.
Sus soldados fluctúan de un bando a otro, probablemente seducidos por las ánimas voluptuosas sobre las toallas y hamacas y ace of base (su consigna marcial). Hasta el punto de quedar sólo en la mitad del patio. Pronunciando descalzo un discurso obsceno con tintes épicos –a esta altura irrepetible- en la más profundad quietud.
LEE
Fatatatadatadaklalalala
tralalalafdafafas
Blablalatafanalalalai!!!
Nonononooooh.
Todas esas casquivanas y petimetres abandonan sus maitais y alzan sus lentes. Abstraídos de la nada. El archienemigo exhala burbujas de rabia. Y aletea sus manos sumergidas cada vez más rápido.
Termina su acto con un escupo elegante a cualquier parte y se retira dándole la espalda a los traidores y putas desconcertadas. Camina con desplante glorioso hacia la cocina donde están sus padres quienes con una mueca burlona de orgullo quieren comentar lo sucedido.
LEE
Ahora no, papá…
LEE sale hacía el patio y camina entre los cachureos empolvados de su infancia:
Mesa de ping pong
Bicicleta oxidada
Máscara de buceo
Casa de perro
Pelota desinflada
con la mirada gacha, planeando el próximo paso, seguramente.
posted by se at 8:16 AM
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